Charlotte Wolf

PERSONALIDAD

Detener a Cherry cuando algo se le mete en la cabeza es una tarea bastante difícil, no es algo realmente sencillo intentar hacerla cambiar de idea bajo ningún punto. Tiene pensamientos siempre claros e ideas firmes, es capaz de expresar a la perfección lo que piensa y sus decisiones siempre están fuerte mente ligadas a sus convicciones.

El tópico de que las mujeres bellas son débiles se refuta totalmente con ella. Es fuerte, y jamás dejará que alguien la vea quebrantarse. Cree de vital importancia verse bien, porque una imagen débil y desalineada corresponde a una mujer débil y desordenada, mientras que una mujer pulcra y comprometida con su apariencia demuestra que es una mujer de pensamientos limpios, comprometida con lo que hace, firme, fuerte y sobre todo: una mujer segura de si misma.

La seguridad es un aspecto fundamental a la hora de describir a Charlotte. Ella, antes que todo, es una mujer segura, de sus decisiones, de sus convicciones, y eso hace que en algunas ocasiones sea algo porfiada, algo terca. Pero su seguridad no impide su impulsividad en ciertas situaciones, por ejemplo cuando se trata de alguien a quien ama, no se detiene a pensar demasiado, solo actúa, nadie puede meterse con lo suyo, ya dos veces le quitaron lo que más ama en la vida, no volverán a hacerlo, se lo ha prometido a si misma- jamás rompe una promesa-. Eso la convierte en alguien absolutamente sobre protectora y celosa, es por naturaleza de instintos dominantes.

Es muy madura y reflexiva, de hecho su gran capacidad de reflexión fue lo que logró convertir los golpes que sufrió últimamente en herramientas para escalar hacia su madurez. Pero no es seria, le gusta bromear, tiene un sentido del humor bastante irónico y cruel en ocasiones, pero no es cruel para nada aunque carga consigo un mal genio bastante explosivo, no es de las que se queden calladitas frente a una ofensa. Es confrontativa pero no pierde la calma ni los estribos, responde acorde al ataque que ha recibido de manera inteligente y mesurada.

Hace una diferencia entre "venganza" y "contraataque". El segundo puede ser instantáneo, casi impulsivo, e inevitable. Mientras que el primero, la venganza, es totalmente evitable, ella es una persona vengativa, pero considera que es un acto que conlleva planteárselo y planearlo por lo cual es evitable. Cherry considera que una buena venganza debe ser paciente, calculada en cada paso, y perfecta en cada detalle, una venganza bien ejecutada siempre es buena y llega a dar beneficios. Al contrario, una venganza rápida, impulsiva, y salvaje, es solo un contraataque, y los contraataques solo fomentan violencia y una respuesta siempre peor del oponente.

Distinguirse entre los demás siempre fue algo que le interesó, incluso antes de que el mundo tomara esta dirección tan extraña, la popularidad es importante para Cherry, tanto como los buenos motivos por los cuales se obtienen, por eso es exigente consigo misma y con el resto, y no considera, ni busca, ser alguien digno de devoción sino de respeto. Por eso solo se relaciona con quienes en realidad le interesan, no le gusta perder su tiempo en quienes no pueden aportar nada a su calidad, de persona, por ejemplo. Es selectiva, no prejuiciosa.

Segura, valiente, protectora, vengativa y demasiado apasionada. Ama lo que hace antes de hacerlo y eso es lo que le da fuerzas para seguir adelante bajo cualquier consecuencia. Y además de todo, es una mujer enamorada, y nadie puede detener a una mujer enamorada.

HISTORIA

10 de Marzo
Para Charlotte.

"Charlotte. Si algún día te encuentras demasiado sola recuerda estos momentos. Recuerda que tienes padres capaces de hacer cualquier cosa por ti. Una madre que si es necesario se levantará en medio de la noche a cubrirte los piés en la cama para que no pases frío. Un padre que es capaz de golpearse la frente contra el cristal con tal de que te rías.... "

Ella se parece mucho a su madre, pelirroja, bellísima, inteligente y audaz, Maddison se enamoró perdidamente del despistado, inseguro e idealista Charles quien fue deslumbrado de inmediato por su belleza.Lo que los unió de inmediato fue la fuerte oposición que ambos tenían por esa nueva idea que comenzaba a instaurarse de que el amor era una enfermedad, no concebían aquello bajo ningún punto, aunque provenían de familias casi destrozadas por errores humanos, sentimentales, o pasionales estaban convencidos de que el amor era la fuerza que movía el universo.

Ambos se convirtieron en grandes exponentes de la comunidad científica pero eso no los detuvo para formar una familia, una familia en la que incluirían aquellos valores que creían tan necesarios y que últimamente estaban muy en desuso.

Charlotte fue el nombre elegido para la pequeña, apenas con semanas de gestación. Charlotte nació en junio, dos días luego del cumpleaños de Charles. La pequeña era saludable, fuerte y hermosa, y como todos los niños creció rápidamente.

Juegos, escuela, amigos, dibujos, crayolas, abrazos, besos, berrinches, alguna que otra caída, todo parecía marchar de lo más normal, todo era casi perfecto, pero nadie sabe que tiene algo perfecto hasta que lo pierde.

"...Niña mía. Nunca dejes de pensar que eres una princesa, lo eres incluso cuando estás sucia de lodo, llorando porque has caído, aún si algún chico ha roto tu corazón o si alguien envidioso te dijo que no lo eres. Eres hermosa, por fuera y por dentro. Jamás, jamás, jamás lo olvides..."

Charlotte siempre fue la princesa de sus padres, la criaron con buenos modales, le dieron la mejor educación e intentaron siempre complacerle casi todos los caprichos, y aunque ella nunca fue demasiado materialista, por decirlo de alguna manera, siempre tuvo lo que quiso, de todos modos si sus padres no podían cumplirle algo ella se las ingeniaba para hacerlo realidad.

Su adolescencia también fue de princesa, obtenía siempre la atención que quería, los chicos que quería, las notas que quería, pero todo por propio mérito. Sus amigas, hasta el momento anterior a ser curadas siempre fueron amigas verdaderas,amigas que realmente valían la pena para él, porque consideraba una perdida de tiempo relacionarse con gente hipócrita o con dobles intenciones.

Su mejor amigo de toda la vida siempre fue el mismo, y aunque muchas veces le fastidiaba su carácter, él siempre sabía como hacerla sentir mejor, como una princesa.

Si hubieron personas que la hicieron sentir menos, chicos que le rompieron el corazón, personas que apreciaba y resultaba ser que esas personas no sentían lo mismo por ella, personas que la dejaron sola cuando más falta le hacía compañía, pero ella no dejó que eso la detenga, contraatacó y siguió adelante.

"No dejes que nada ni nadie te detenga jamás. Las dificultades no son trabas, son obstáculos a ser superados Cherry, no permitas que las personas malas se conviertan en trabas, que solo sean obstáculos. El mundo está repleto de personas malas, pero también hay personas equivocadas, que no es lo mismo Charlotte, tienes que aprender a distinguirlas, cuando lo hayas logrado te ahorrarás muchos chascos..."

Su relación con sus padres era buena. Nada fuera de lo normal, como a cualquier adolescente a ella le gustaba pasar más tiempo sola o con sus amigos que con sus padres, pero siempre que necesitaba un consejo su madre estaba allí con ella. Sus padres eran muy unidos entre sí, se notaba a la legua que se amaban muchísimo, solían hacer viajes juntos, salir a cenar solos. Siempre encontraban motivos para festejar y le trasmitieron eso a su hija. Cherry siempre amo las fiestas, y de hecho fue muy buena planeandolas durante su estadía en la secundaria.

"... Sonríe, que una sonrisa siempre se luce mejor en un rostro hermoso como el tuyo, sonríe a tus amigos, pero sobretodo a tus enemigos, demuéstrales que no podrán hacer nada para destruir tu felicidad, porque es enorme, indestructible. Tú debes ser indestructible"

Pocas personas la vieron llorar; sus padres y su mejor amigo. Punto final. No hubo grandes tragedias en su familia anteriormente al asesinato de su madre, pero siempre existieron las peleas familiares, cuando las cosas comenzaron a complicarse afectó a sus padres y el roce fue inevitable, odia ver a quienes ama pelearse entre si. O bueno, no sabía que lo odiaba hasta ese momento.

Lloró pocas veces, pero sin dudas cuando más lo hizo fue cuando se llevaron a su madre para ser curada, más que cuando se enteró de que la habían matado, cuando la mataron solo sintió muchísimo odio, muchísimo rencor, pero otro sentimiento extraño además se cruzó por su corazón, la admiración por la valentía de su madre, aquella manera de impedir romper sus convicciones le marcó el camino para el resto de su vida.

Cuando curaron a su padre lloró también, pero para ese entonces había llorado demasiado, sus lágrimas parecían acabarse, o era como si su dolor se estuviera fraccionando, volviéndose en pequeños fragmentos, estaba conviertiéndose en una persona más fuerte. Se proponía lograrlo, se proponía convertirse en alguien indestructible.

El día en el que la iban a intervenir escapó, pero no lo hizo como su madre, intentó aprender de ella, como lo había hecho siempre. Cherry planeo todo, estuvo maquinando en su mente ese plan durante meses, aveces tenía intenciones de contarle a Callum, antes de que lo intervinieran, antes de ser intervenida, pero sabía que él se iba a negar, sabía también que era posible que él le convenciera para no hacerlo, y eso no podía suceder.

Ni siquiera necesitó correr demasiado, su fuga fue un éxito, sus capacidades sociales le permitieron de inmediato hacer contacto con carroñeros e inválidos, al principio permaneció con los inválidos, pero la destreza y rapidez con la que los carroñeros conseguían todo le llamó la atención, consideró que aquello tenía más que ver con ella que los inválidos.

Cherry no volvió hasta días antes de que Callum fuera intervenido, había recibido el apoyo de muchos de La Resistencia para salvarlo, puesto que mientras más se mantuvieron incurados, más grande serían, más cantidad, más poderosos. Sabía que iba a costarle demasiado, había planeado lo que le iba a decir, había pensado las palabras exactas que iba a decirle a su amigo, cómo iba a mirarlo, todo, pero una vez frente a él la desesperación, por primera y única vez en su vida la devoró. No iban a quitarle a Callum ahora, era lo único que le quedaba, la única persona valiosa que aún la amaba tanto como ella lo amaba. Las palabras no salieron igual a como las había pensado, ni siquiera sonaron iguales, solo fueron una proposición desesperada, un súplica, nada prometedor, él se negó, su corazón se rompió. Pero no lloró.

Volvió, muchas veces. Muchas veces lo vió, intentó con sus ojos escrutar en lo más prfundo de su alma ¿Tenía acaso alma? ¿Le quedaba algo de ella? No lo sabía, no lo comprendía, aveces se sentía algo perdida cuando estaba para frente a él, sin poder acercarse, conversar, abrazarlo, porque tenía ganas de darle todos los abrazos que no pudo darle antes.

Los extraña, a mamá, a papá... A Callum no, porque a él, se prometió rescatarlo.

"...Esté donde esté, hija, estaré contigo, siempre.

Te amo.
Mamá

"