Thero Z. Diamantidis {ID}

PERSONALIDAD

A Thero se le puede identificar con todo lo malo: ambicioso, soberbio, cruel, despiadado, impulsivo pero no por eso dejará de ser calculador y metódico. Según él, y quienes han convivido con él, era incapaz de amar aun antes de la intervención y demostrar sentimientos tales como la compasión, la piedad y la benevolencia, entre otros. Frío a más no poder: no le importará lastimar a cualquiera que se le ponga enfrente. Orgulloso y con un ego por encima de las mismas nubes, siempre encuentra ocasión para jactarse de sus habilidades y poderes y de la influencia que puede llegar a tener en asuntos demasiado importantes. Manipulador nato y decidido: siempre ha de conseguir lo que desea sin importarle el costo.

Bastante hábil a la hora de hablar (razón por la cual se vale de esto para manipular a la gente), maneja la retórica como si se tratara de un juego de niños y el sarcasmo es una herramienta a la que siempre recurre a la hora de comunicarse. Sin importarle si herirá o no a quien se dirija a él, será sincero y ácido a la hora de una conversación. Eso sí, cuida bastante sus palabras (sobretodo frente a los demás miembros del consejo) y esconde muy bien sus propósitos. Se le da muy bien eso de hablar en clave para que los demás adivinen el verdadero sentido de sus palabras. De una mente retorcida, disfruta de la tortura tanto física como psicológica. Y aunque la muerte no es para él el fin definitivo de los enemigos, le causa un placer difícil de comprender asesinarlos, por lo cual le encanta hacer el "trabajo sucio" en más de una ocasión. A la par, y como parte de su engañosa personalidad, Zarek actúa como un caballero, seductor y refinado, frente a hombres y mujeres por igual, pero siempre listo para traicionar, mentir, lastimar o atacar todo por su bien o el bien de los suyos y su Señor.

HISTORIA

Nacido en tierra salvaje. Hijo de una familia de Carroñero e Invalidos. Su padre Xenon, se enamoro de Elena, quien era partidaria de los derechos a poder amar, aunque Xenon compartía una manera distinta de combatir. Como el amor es extraño, ellos terminaron juntos, y de esa unión nació un pequeño varón, el cual seria llamado en honor a sus raíces, Thero {Salvaje}.
Su infancia fue buena, no podía quejarse. Todo era fácil. Cazar, comer y lleno de amor por parte de su familia. Pero todo cambio cuando el pequeño Thero cumplía 6 años y vino al mundo aquella pequeña, que seria llamada como su madre... Elena. Thero noto que algo pasaba. Aun por tener tan corta edad noto que el cariño había cambiado y que todo era efímero, que sus padres ahora le daban el "amor" a aquella pequeña que había llegado a quitarle el lugar, eso simplemente formo algo oscuro en un pequeño de 6 años.
Transcurrieron cuatro años y el odio en el corazon de Thero seguia creciendo. Así que una noche, mientras todos dormian, aquel pequeño ojiazul, salio de tierra salvaje, adentrandose en zona "segura" y entregando a su familia a las autoridades. Esa noche fue una masacre, toda la "aldea" fue consumida por las llamas y los padres del pequeño fueron asesinados frente a los ojos del pequeño, quien con una sonrisa veia como sus padres. Aquellos supuestos seres que le daban "amor" eran consumidos por las llamas. No conforme con eso, Thero pidio que mataran a su hermana, pero ella habia logrado escapar, ya que su madre la llevo con los carroñeros.

Diecisies años han pasado desde esa noche, y ahora aquel niño con cara angelical, se ha vuelto un hombre. Un poderoso hombre del consejo. Sin amor, ni capacidad de darlo, una autentica arma letal. Tiene un buen puesto y dedica su vida a destruir aquello que sus padres se habían dedicado a inculcarle. Pero lo que Thero no sabe es que su hermana Elena, sigue con vida, pensando que su hermano esta en tierra salvaje, luchando como ella... Grave error de la pequeña Elena, ya que aquel "hermano" era exactamente lo que sus padres habian querido... Un salvaje.